Resultados Elecciones
Europeas 2014.
Lo primero que hay que decir
es sobre la participación, un 45,86 % de votantes en España.
No somos tan diferentes en
toda Europa, un 43,11% de votantes en Europa, con estos datos quien no puede
referirse a un “proyecto fallido”. Pues no crean en España es difícil oírlo,
quedarse en desafección política es cuando menos imprudente. Los ciudadanos
pretenden conseguir a través de la política la resolución de sus problemas y
vertebración de la sociedad en la que vive. Que proyecto puede sobrevivir
involucrando a menos de uno de cada dos. Pues no reaccionan porque hay que ir
muy lejos para que los que conocen la primera cifra que es la de la
participación, se refieran a este hecho como algo destacable o preocupante. ¿Qué
Europa pretenden construir?
Los resultados siguientes,
los de los partidos, tampoco son muy alentadores. Poco más que, los electos
deciden quién va a ser el jefe de gobierno, es lo que transciende como algo
novedoso, de lo nuestro, nada de nada, así que, ¿Qué es lo que quieren?
En España confiemos en que
las nuevas incorporaciones (Podemos, IU, verdes, etc.), lleguen a acuerdos en
Europa para crecer lo suficiente para influir, tienen muchas cosas en común y
de esta forma tener una alternativa que se consolide y pueda crecer en un
futuro.
Los mercados puros y duros,
de momento, se frotan las manos, ante tanta confusión y atomización, pero en la
estrategia y la voluntad de acordar pueden tener ”el susto”.
Lo de Cataluña va en serio.
A ver si nos ponemos de acuerdo con tanto bandazo, vamos del categórico, “Constitución,
no permitido, imposible”, al “estos van en serio, habrá una consulta en
Noviembre, se puede”. Por otra parte nada extraño, ya la aprobación y
aceptación social del divorcio, en la evolución de la convivencia social, nos
presta estructuras de razonamiento, para actos y voluntades “hasta la muerte, o
para siempre”, en los que deciden los propios afectados.
Ellos mismos.
csl.