El
Pecado original
A pesar de la constatación de vivir en la II Revolución
Industrial, de estar inmersos en la Sociedad del Conocimiento, donde las cosas
ya no son como eran, donde los cambios afectan a todos los niveles de nuestra
vida: el crecimiento acelerado de las ciencias cambia constantemente la
interpretación de la realidad, las tecnologías cambian continuamente nuestras
formas de incidir en ella, nuestras formas de trabajar, de organizarnos y, como
consecuencia, nuestras formas de sentir y actuar. Todo cambia continuamente, hasta
la espiritualidad religiosa se tiene que redefinir o morir. Entretanto la
espiritualidad laica se concreta y desarrolla, a pesar de esto algunos se
empeñan en dotarnos de un pecado original. Este pecado se llama ser Español, y
se contrae al nacer ya se sospecha que quienes ejercen esta potestad pudieran
ser considerados nacionalistas españoles, y además seguidos por una legión de
acólitos que no ceden ni un ápice en sus planteamientos.
Contentos tiene que estar los catalanes que se sienten
catalanes o los vascos o los gallegos, a todos desde que nacemos nos han dotado
de un pecado original.
Ba. Ba, Ba, todos nacemos españoles y ya no podemos ser
otra cosa.
Los que podemos mirar a unos años atrás y en la década de
los 70 vimos el final de la dictadura y en la década de los 80 comenzó el
desarrollo de muchos puntos de nuestro modelo de vida en común, es decir la
democracia. Asistimos a planteamientos que resolvieron lo que hoy consideramos
decimonónicos como la separación y el divorcio, lo que antes era para toda la
vida ahora con tal de que alguno de los cónyuges lo decida, pues ya puede
separarse y con un acuerdo social y económico, divorciarse. A nadie se le
ocurriría consultar para obtener consentimiento a la familia, hombre, son gente
adulta. Aunque los catalanes deben ser aniñados pues mucha España cree que
tiene que decidir sobre ellos.
Pues, ¿Quién quiere convivir o compartir un proyecto con
quien no quiere estar con nosotros?, pues seguramente nadie y los que pretender
obligar a pesar de todo a convivir juntos, ¿Qué son?...
Hacemos intentos por normalizar las cosas con el mínimo
esfuerzo, cuando es preciso, respetar, molestarse y actuar.
Dos ejemplos, la monarquía impuesta y el futuro de los
pueblos.
Una reflexión más en "Una vuelta de tuerca",http://proyectohomo.blogspot.com.es/2016/05/una-vuelta-de-tuerca.html
csl.
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