Parte
de este texto pertenece al Dr. Jon Kabat-Zinn que se expresa en primera persona
y forma parte de su publicación “Mindfulness para principiantes” pág.69:
Desde
1979 mis colegas de la Clínica de Reducción del Estrés del centro médico de la
Universidad de Massachussets y yo hemos ofrecido, dentro de la corriente
principal de la medicina, entrenamiento en mindfulness en forma de los programas
REBAP a quienes no están satisfechos con el modo en que el sistema sanitario se
ocupa de su salud, para ayudarles así a enfrentarse al estrés, dolor,
enfermedad, malestar. Hay veces en que llegan a sentirse como si estuvieran
cayendo, o hubiesen caído tiempo atrás- en alguna de las grietas del sistema
sanitario. Cuarenta años después, sin embargo, el sistema sanitario no solo
aparece aquejado de grietas, sino de auténticos abismos.
Existe
un amplio debate sobre lo que debemos pagar por el cuidado de la salud, pero
todavía no está muy claro lo que es exactamente ese “cuidado”, ni lo que es la
salud verdadera, como cuidarla y recuperarla.
Es
sabio, en tales circunstancias, asumir cierta responsabilidad por la propia
salud y bienestar. De hecho, este tipo de compromiso personal con la salud es
un elemento fundamental de la nueva visión de la medicina, un modelo mucho mas
participativo y en el que el paciente desempeña un papel muy importante en la
movilización de sus propios recursos curativos.
Una de
las ideas que hay detrás del programa REBAP consiste en ayudar a las personas a
descubrir que pueden hacer para complementar el trabajo realizado por médicos,
cirujanos y sistema sanitario y, partiendo del punto en que se hallen cuando
decidan que ha llegado el momento de asumir se compromiso, llegar a niveles as
elevados de salud y bienestar.
Pero,
cuando hablo de “salud y Bienestar”, me refiero al más profundo y amplio de los
niveles, algo que no se limita exclusivamente a la salud corporal. La verdadera
salud no consiste en llevar a las personas a un estado de ausencia de
enfermedad considerado “normal” sino a un nivel de funcionamiento y bienestar
físico, emocional y mental óptimo que el sujeto desarrolla, a través de la exploración
sistemática y disciplinada, en el laboratorio de su propia vida, con la
intención de descubrirla auténtica magnitud de su dimensión humana. Y esto es
algo que se ve catalizado por la familiarización con nuestro cuerpo y nuestra
mente (que, en última instancia no están separados) y el cultivo sistemático de
nuestras capacidades biológicas y psicológicas intrínsecas por el bienestar y
la sabiduría, incluidas la bondad y compasión que yace en el interior de cada
uno de nosotros.
REBAP, el Minfulness
aplicado a la reducción de estrés
La
REBAP se ha expandido a clínicas, centros médicos y hospitales de todo el país (EE.UU.)
y de todo el mundo. Las medidas guiadas
que presentamos en este libro son muy parecidas a las que mis colegas y yo
utilizamos en el programa REBAP con nuestros pacientes de la clínica de
reducción de estrés.
Este
enfoque no solo sirve para personas enfermas o aquejadas de dolor crónico o
problemas mentales. Siendo universal, resulta aplicable a toda persona interesada
en su bienestar.
El
mindfulness, como ya hemos dicho, tiene que ver con darse cuenta, es decir, con
la cualidad, estabilidad, fiabilidad y capacidad de liberarnos del hábito de
degradarnos e ignorar lo mas importante de nuestra vida. El mindfulness
desarrolla la atención pura, el discernimiento, la visión clara y la sabiduría,
porque “la sabiduría” consiste en ir mas allá de nuestra percepción y
comprensión equivocada de la realidad hasta conocer la realidad misma de las
cosas. E, independientemente de quienes seamos, son muchas estas percepciones y
aprehensiones equivocadas, porque es muy fácil quedar atrapados en nuestros
sistemas de creencias, ideas, opiniones y prejuicios. Todo eso configura una
especie de velo o nube que nos impide ver lo que hay frente a nosotros y actuar
de un modo que realmente refleje lo que mas valoramos y lo que mas nos importa.
Hay ocasiones en que los miembros de nuestra familia tratan -movidos por el amor
o la desesperación- de señalarnos el sufrimiento innecesario que generamos negándonos
a ver las cosas, tomándonoslas de un modo demasiado personal o distorsionándolas.
Pero,
aun en tales circunstancias, resulta muy difícil que alguien pueda llegar hasta
nosotros, porque solemos estar tan atrapados en nuestras ilusiones y hábitos distractivos
que no solemos escuchar y, en el caso de hacerlo, no nos creemos lo que nos
dicen.
Un buen ejemplo para reflexionar hacia donde puede mirar la medicina del futuro.
csl.